martes, 29 de diciembre de 2015

Camuflaje

a veces no hay tiempo que valga
un día llovió y pude llorar
mis lagrimas, con la lluvia,
parecieron camuflarse sobre la gente que nada lo ve.
Y una noche grité
metiendo la cabeza
bajo el agua en la bañera
y mi grito no fue escuchado
por la gente que nada lo escucha

por años creí que ocultar esto que siento
iba a ser un alivio para los demás
pero no pensé en mi, grave error.
lo que no se dice te contamina,
y a veces no hay tiempo que valga

un día llovió y lloré,
y te crucé en la calle
no notaste mi llanto,
se bien como ocultarte cosas
tampoco notaste que me sacaste una sonrisa
aquel día en la ventana
como otras tantas que nunca viste
a veces no quiero ocultar esas cosas
pero la pregunta siempre es:
¿yo me oculto o vos simplemente no me ves?

A veces no hay tiempo que valga
un día salió el sol y lloré
y no me importó llorar
desde ahí me siento mejor.

martes, 1 de diciembre de 2015

El rayo y el pararrayos

Ayer me asomé a la ventanita
donde te vi y me sonreíste,
pero no apareciste.
Y en ese momento
me di cuenta
que sos como un rayo,
nunca cae en el mismo lugar...
Ésto me hizo pensar
que haberte conocido
fue pura suerte.
Pero yo no creo en la suerte,
por lo tanto, creo que,
para que hayas aparecido el día en que te conocí,
debí haber sido un buen pararrayos.
La causalidad,
yo nací estático y vos vivaz,
y creyendo que
estos dos objetos nunca se iban a encontrar,
se chocaron una noche,
y fueron uno en un segundo.
Pero el rayo se fue,
y el para-rayos se quedó con algo dentro
que nunca pudo sacar.
El rayo no volvió,
el pararrayos siempre esperó

Cambiar al mundo

Vos y tu sueño hermoso de cambiar al mundo... me encanta
pero te empecinaste tanto en tratar de cambiar al mundo
que te olvidaste de aparecer en el mio.
No apareciste para mejorarlo, cambiarlo
lo ausentaste dejando sombras
que fueron desapareciendo lentamente a medida que se asomaba el sol
desvaneciendo con el tiempo los recuerdos
ya no se si son reales mis recuerdos con vos
creo que los imagine.

Le cambiaste el mundo a muchas personas que no conocías
a mi solo me dejaste una tormenta en la garganta,
nunca pude llorarte, creo que siempre hay un hilo que queda aferrado
trato cortarlo, pero solo logro alargarlo
cada vez más tediosa la tarea de decirte "Chau"

Me enamoré de tu idea de cambiar al mundo
Aún sigo enamorado de esa idea,
y el sacrificio fue no verte nunca más.